Con el título servido en bandeja 

Sin exponer su mejor versión Arienzo ganó un durísimo partido de atrás contra el último de la tabla y quedó a un pasito del título tras la sorpresiva victoria de L-Gante ante Invictus. El juego enfrentaba a dos equipos de barrios hermanos los de Buceo vs los de Malvín. Y precisamente fueron los primeros quienes tendrían la iniciativa en gran parte del juego. Sin nada que perder pero con mucho honor para ganar salieron a darle batalla a uno de los líderes de tabla. A pesar de que el referente de ataque, Lucas Consani, ocupó el rol bajo los tres palos, Los Pibes no perdieron peso ofensivo sino más bien que tuvieron a mal traer a Arienzo, aunque igualmente el primer tiempo culminó igualado a 0.

En el complemento incluso se incrementó el ritmo del juego, ya que el líder era consciente que no podía desaprovechar la oportunidad de quedar bien arriba de la tabla en solitario. Pero lo que llegó fue el gol de Los Pibes que le puso dramatismo al juego cuando Rodrigo Ponce De Leon metió un cabezazo cuyo destino fue la red. A partir de ese momento llegaron dos situaciones de ampliar la ventaja: un remate de Bruno Retamar y luego un tiro libre de Rodrigo Kralicek, ambas resueltas muy bien por el arquero. Cuando el partido parecía ponerse cada vez más complicado para Arienzo llegó un rebote que descolocó a la línea defensiva del rival apareciendo Gonzalo Casanova para igualar juego. Los minutos siguientes fueron trancados con los dos yendo a buscar el segundo pero sería Arienzo quien lo conseguiría tras una pared entre Casanova y Francisco Della Santa que Consani no pudo despejar. La suerte de campeón estaba presente en el encuentro. La tranquilidad de la amplitud del marcador se vio opacada por el desempeño del conjunto del Buceo. Casi como jugando una final el elenco azul y blanco lo dejó todo en la cancha, metiendo atrás al líder quien terminó pidiendo la hora ya que parecía que el empate era inminente. Tras el silbato final pudo realmente respirar tranquilo y en una acción muy honorable felicitó al rival por la entrega en el partido. Ahora Arienzo vuelve a depender de sí mismo y está tan solo a un empate de volver a conseguir un nuevo título de campeón en la máxima categoría de los lunes.